Retratos con profundidad extrema

Nikon Z 85mm F/1.2 S

El Nikon Z 85mm F/1.2 S es una obra maestra óptica diseñada para capturar retratos con una profundidad emocional y visual que trasciende lo convencional. Su apertura ultra rápida de f/1.2, formada por 11 hojas redondeadas, permite crear un desenfoque de fondo suave, envolvente y natural, ideal para aislar al sujeto y destacar cada expresión con una claridad impresionante. Este nivel de bokeh no solo embellece la imagen, sino que añade una dimensión artística que transforma cada retrato en una experiencia visual única.

Precisión en cada transición de enfoque

Este objetivo ofrece un control de enfoque excepcional, tanto en modo manual como automático. Con cámaras como la Z 9, Z 7II y Z 6II, se puede habilitar el enfoque lineal para realizar extracciones de foco precisas y fluidas, ideales para producciones de video o retratos creativos. En modo automático, el sistema Eye-Detect de Nikon trabaja de forma casi silenciosa, asegurando que el enfoque se mantenga en el punto exacto, incluso en situaciones dinámicas o con poca luz. Cada transición se realiza con elegancia, sin distracciones ni interrupciones.

Compatibilidad versátil para fotógrafos exigentes

Diseñado para el sistema sin espejo Nikon Z, este objetivo es compatible tanto con cámaras de formato completo (FX) como con sensores APS-C (DX), ofreciendo un campo de visión equivalente que se adapta a distintas necesidades creativas. En cuerpos APS-C, la compresión de perspectiva y el plano de enfoque extremadamente delgado generan un efecto tridimensional que resalta al sujeto con una intensidad visual cautivadora. Esta versatilidad lo convierte en una herramienta poderosa para fotógrafos que buscan calidad sin compromisos, sin importar el formato.

Controles intuitivos para una experiencia profesional

El Nikon Z 85mm F/1.2 S no solo destaca por su rendimiento óptico, sino también por su diseño funcional. El botón L-Fn permite activar funciones clave como el seguimiento de sujetos, la reproducción de imágenes o el bloqueo del enfoque automático, mientras que el anillo de control ofrece ajustes manuales precisos de apertura, ISO o compensación de exposición. Esta combinación de controles intuitivos y personalizables brinda al fotógrafo una experiencia fluida y profesional, donde cada detalle está al alcance de la mano.