La Sony A9 III marca un antes y un después en la fotografía profesional con la incorporación del primer sensor CMOS apilado full-frame de 24.6 megapíxeles con obturador global. Esta innovadora tecnología permite que todos los píxeles se expongan y se lean simultáneamente, eliminando por completo la distorsión de imagen causada por el desplazamiento del obturador tradicional. Gracias a esta arquitectura, la cámara logra capturar sujetos en movimiento extremo con una fidelidad sin precedentes, ofreciendo una velocidad de obturación máxima de 1/80000 segundos, y hasta 1/16000 segundos en disparo continuo. Esta capacidad redefine lo que es posible en fotografía deportiva, de naturaleza y de acción.

Disparo continuo sin interrupciones, incluso en ráfagas extremas

La A9 III está diseñada para no perder ni un solo instante. Su capacidad de disparo continuo alcanza hasta 120 fotogramas por segundo con seguimiento completo de enfoque automático y exposición, sin interrupciones visuales en el visor electrónico. Esto permite al fotógrafo mantenerse conectado con la escena en todo momento, sin espacios negros ni retrasos. Además, su unidad de procesamiento basada en inteligencia artificial reconoce sujetos con una precisión excepcional, adaptándose a sus movimientos y asegurando un seguimiento fiable incluso en situaciones complejas.

Iluminación uniforme en cada disparo, incluso con flash

Una de las ventajas más revolucionarias del obturador global es su compatibilidad total con flashes externos a cualquier velocidad de obturación. Esto elimina los problemas de sincronización típicos de la fotografía con flash en alta velocidad, como la caída no lineal de iluminación. Con la A9 III, cada imagen se ilumina de forma uniforme, lo que resulta ideal para sesiones profesionales donde la consistencia de luz es fundamental, ya sea en estudio o en exteriores.

Sensor Exmor RS: arquitectura avanzada para resultados impecables

El corazón de la A9 III es su sensor Exmor RS, que combina una arquitectura CMOS apilada con memoria integrada y conversión A/D de alta velocidad. Esta estructura permite una lectura simultánea de todos los píxeles, lo que se traduce en imágenes de alta resolución sin distorsión, incluso en escenas con sujetos en movimiento rápido. El procesamiento interno minimiza el retraso y maximiza la eficiencia, ofreciendo un rendimiento que supera los estándares actuales de captura profesional.

Enfoque automático adaptable y áreas personalizables

La flexibilidad del sistema de enfoque automático de la A9 III permite adaptarse al comportamiento del sujeto, ya sea que esté estático, en movimiento constante o cambiando de velocidad. El usuario puede elegir entre configuraciones como Estable, Estándar o Receptivo, según las necesidades de la escena. Además, la cámara ofrece una amplia gama de tamaños de área de enfoque, desde XL hasta XS, ideales para situaciones específicas como fotografía de animales en entornos complejos. Incluso es posible definir áreas de enfoque personalizadas con proporciones verticales, lo que brinda un control total sobre la composición y el punto de atención.