La Sony A7CR redefine lo que significa ser una cámara compacta para creadores exigentes. Con un diseño optimizado para llevarla todo el día, esta cámara sin espejo combina la resolución de 61 megapíxeles del sensor Exmor R con el potente procesador BIONZ XR, heredado de la a7R V, para ofrecer una calidad de imagen profesional en un cuerpo ligero y portátil. Es la elección perfecta para quienes buscan rendimiento sin comprometer movilidad.

Resolución extrema y procesamiento inteligente

El sensor de fotograma completo de 61 MP, junto con el motor BIONZ XR, proporciona imágenes de alta claridad, bajo ruido y un rango dinámico de hasta 15 pasos. Esta combinación permite disparos continuos de hasta 8 fps con obturador mecánico y 7 fps con obturador electrónico, manteniendo el enfoque y la exposición automática. Además, en modo JPEG, es posible capturar más de 1000 imágenes en una sola ráfaga, ideal para sesiones intensas y momentos irrepetibles.

Tecnología avanzada para detalle y color

Gracias al modo de disparo múltiple con desplazamiento de píxeles, la A7CR puede generar archivos de hasta 240,8 MP, logrando una precisión de color y detalle que supera incluso lo que ofrece su sensor nativo. Este sistema, combinado con la estabilización de imagen por cambio de sensor, permite capturas de 19.008 x 12.672 píxeles, ideales para trabajos de impresión o edición profesional.

Inteligencia artificial al servicio de la imagen

La cámara incorpora algoritmos de IA que detectan la postura humana y las áreas de piel para ajustar la exposición con mayor precisión, incluso en condiciones de contraluz o iluminación directa. Este sistema mejora la fiabilidad del enfoque automático y el balance de blancos, ofreciendo retratos más naturales y colores fieles a la realidad.

Estabilización optimizada para cada disparo

El sistema de estabilización de imagen óptica de 5 ejes ha sido perfeccionado para ofrecer hasta siete pasos de compensación, contrarrestando eficazmente cinco tipos de vibración. Gracias a la Unidad de Procesamiento de IA, la comunicación entre el cuerpo y la lente se vuelve más precisa, permitiendo encuadres estables incluso antes de disparar. Esto garantiza resultados nítidos, incluso con lentes adaptadas o en condiciones de disparo manual.