¿Vale la pena una SSD externa como la SanDisk PRO-G40 de 4 TB?

Si estás buscando una unidad externa rápida, resistente y con mucho espacio para tus archivos, probablemente ya te topaste con la SanDisk Professional PRO-G40 SSD de 4 TB. Sí, esa que parece un tanque y promete velocidades absurdamente rápidas. ¿Pero realmente vale la pena? Vamos a desmenuzarla juntos.

¿Qué tiene de especial una SSD externa?

Primero lo básico: las SSD (discos de estado sólido) son muchísimo más rápidas que los discos duros tradicionales (HDD). Y cuando hablamos de versiones externas, lo que buscamos es velocidad + portabilidad + resistencia. Aquí es donde modelos como la PRO-G40 brillan… o al menos, eso dicen.

Características clave de la SanDisk PRO-G40

• Capacidad: 4 TB, más que suficiente para fotos, videos 4K, proyectos pesados y respaldos eternos.

• Velocidad: con Thunderbolt 3, puede llegar hasta 3000 MB/s en lectura y 2500 MB/s en escritura. Si usas USB-C, baja un poco pero sigue siendo rápida (unos 1000 MB/s).

• Construcción tipo tanque: resistencia al polvo, agua (IP68), caídas y hasta lo puedes pisar (resiste 4000 lb de presión).

• Diseñada para Mac (pero funciona en Windows): viene formateada en APFS, pero puedes darle formato para Windows si lo necesitas.

¿Qué tan rápida es en la vida real?

Spoiler: es una bala.

• Con Thunderbolt 3: en pruebas reales llegó a más de 2600 MB/s de lectura.
• Con USB-C: rondó los 950 MB/s, que es lo máximo que permite ese puerto.
• Y lo mejor: no se calienta como horno, gracias a su cuerpo de aluminio que actúa como disipador. Puedes transferir gigas sin que se ahogue.

¿Entonces vale la pena?

Depende de lo que necesites:

• Si trabajas con archivos grandes, editas video en 4K o más, y necesitas velocidad y portabilidad sin compromisos, la PRO-G40 es excelente.

• Pero si solo quieres guardar tus fotos y hacer backups, hay opciones más baratas como el Samsung T7, el SanDisk Extreme Portable, o incluso un HDD si no te importa la velocidad.

En resumen

La SanDisk PRO-G40 SSD de 4 TB es como el Ferrari de las unidades externas: potente, rápida, resistente… y cara. Perfecta para profesionales creativos que necesitan rendimiento top y no pueden andar perdiendo el tiempo con discos lentos.

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